El pasado Gran Premio de Mónaco fue una carrera en donde se presenció un nuevo capítulo histórico en los deportistas mexicanos. El piloto mexicano, Sergio “Checo” Pérez, logró alcanzar el escalón más alto del podio de la Fórmula 1 en nada más y nada menos que en el principado de Mónaco. Para muchos pilotos, esta carrera es posiblemente la más codiciada ya que no es cualquier fin de semana, es una especial. Los pilotos llegan al circuito callejero con todo el lujo que este conlleva.
Tiendas de marcas reconocidas mundialmente por todos lados, yates lujosos, celebridades por donde sea que voltees, coches que valen unos cuantos millones de dólares, el famoso casino de Mónaco, entre muchas otras cosas. Pero el circuito es diferente. Se trata de un trazado de 19 curvas y un total de 78 vueltas, en donde cada curva es un reto diferente ya que son milímetros los que tienen los pilotos para pasar su monoplaza. Hemos visto choques que se producen después de un mínimo error por parte del piloto. Con todo esto entendido, ganar el Gran Premio de Mónaco no es una tarea sencilla.
En las prácticas libres, Charles Leclerc se posicionó en la primera posición seguido muy de cerca por el Red Bull de Checo, quien estuvo a solo 0.039 segundos de quitarle la primera posición al piloto de casa. En la sesión vespertina, ambos Ferrari sorprendieron con su ritmo a una vuelta y tuvieron un 1-2 con Leclerc arriba de Sainz. Por su parte, el mexicano logró la tercera posición, pero a una diferencia considerable de 0.379 segundos.
Este resultado ya era un indicio de que el equipo Italiano sería el equipo a vencer en la sesión de clasificación. La última sesión de entrenamientos libres, llevada a cabo el sábado por la mañana, fue liderada por el Mexicano, sacándole 0.041 segundos de diferencia respecto a Leclerc, quien finalizó en la segunda posición. La sesión de clasificación fue el primer punto clave para la eventual victoria del Mexicano. Tenemos que reconocer que en este trazado es sumamente importante clasificar en buena posición, ya que es un circuito en donde los rebases no son fáciles.
En el primer intento, ambos Ferrari se colocaron 1-2, con el héroe local por delante, mientras que el mexicano se posicionó tercero con Verstappen en cuarta posición. En la última oportunidad para lograr la pole position, el piloto holandés estaba teniendo excelentes parciales en su última vuelta, sin embargo, el piloto Mexicano chocó en la curva 8, haciendo que la sesión se detuviera con bandera roja y ese fuera el final de la clasificación. Este hecho impidió que su compañero de equipo lograra batir el tiempo de los Ferrari, haciendo que los italianos se quedaran con su 1-2 y el Mexicano en tercer lugar.
Créditos: Red Bull Content Pool
La lluvia cayó el domingo de la carrera. Todos los pilotos comenzaron con neumáticos de lluvia extrema, algunos fueron probando su suerte y cambiaron a intermedios, sin embargo, la lluvia continuaba y los neumáticos azules parecían ser la mejor opción. Ambos Ferrari se mantenían en las dos primeras posiciones con los dos Red Bull por detrás. En la vuelta 17, Checo decide cambiar sus neumáticos de lluvia extrema por intermedios. En el giro 19, Verstappen y Leclerc también hacen la misma jugada que el Mexicano.
El momento en donde todo cambió en la carrera fue en la vuelta 21, en donde una mala comunicación entre Ferrari y sus pilotos hizo que Sainz parara a cambiar por neumáticos de seco, mientras que Leclerc también lo hiciera, lo cual le hizo perder demasiado tiempo. Una vuelta después, ambos Red Bull volvieron a cambiar sus neumáticos por duros. El incidente interno en Ferrari hizo que Charles Leclerc cayera hasta la cuarta posición, y Sainz hasta la segunda, ahora Checo lideraba la carrera y Max se colocaba en posición de podio.
La carrera empezaba a llegar a su final, y faltando 10 minutos para que concluya, la pelea por la primera posición estaba entre los dos Red Bull (P1 y P3) y los dos Ferrari (P2 y P4). Llegó la bandera a cuadros y el piloto madrileño de Ferrari no logró rebasar al Mexicano, resultando en una victoria más al palmarés de Checo Pérez. Fue una carrera llena de emociones, pero solo fue posible gracias a que el piloto Mexicano logró aprovechar el incidente interno dentro del equipo italiano. La “maldición” continuó un año más para el piloto de casa, Charles Leclerc, quien sigue sin conseguir la victoria en la ciudad que lo vio nacer.
¿Quién se parará en el escalón más alto del podio este domingo en el principado de Mónaco?